Los niveles de ruido generados en el exterior pueden llegar a ser muy molestos e incluso, hasta en algunos casos, perjudiciales para la salud. Una vía efectiva y económica para reducir estas emisiones se encuentra en la instalación de vidrios de aislamiento acústico. Las características básicas de una ventana con aislamiento acústico se centran en la calidad del vidrio, la buena compacidad y un correcto montaje.
La utilización de vidrios con capacidades de flexión (vidrios combinados con láminas y aislamiento térmico o vidrios laminares de seguridad) garantiza los óptimos resultados, a lo que se suma una protección extra contra robos y disminución de lesiones en caso de rotura.